ESPECIAL “SUPERVIVIENTES, PERDIDOS EN HONDURAS”

La llamada de Isabel Pantoja hizo que “Supervivientes” llegase a alcanzar el 40% de la audiencia.

Después de una semana con terribles sufrimientos a causa de la gota, Kiko Rivera recibió una llamada de su hermano, Francisco Rivera Ordóñez, el cual le dio ánimo y le dijo que todos los jueves ponían “la isla” para verle. A esta llamada tan fraternal le siguió una carta de su abuela, que también le dio ánimos. Kiko le mandó un mensaje cariñoso a su “yaya” y la felicitó su reciente cumpleaños. Y por último, y para cerrar el círculo familiar, el hijo de Paquirri recibió la llamada de su madre, Isabel Pantoja, la cual le dijo que se quedase hasta que su cuerpo, o mejor dicho, su gota, aguante. Fue una conversación decisiva, que hizo cambiar el pensamiento del concursante, que decidió quedarse hasta el lunes, día en el cual decidirá si se marcha de la isla o se quedará, para seguir luchando por el dinero del premio.

A parte de estos momentos tan entrañables, la gala estuvo marcada por la decisión que tomaron los anónimos: expulsar a Jacobo Ostos y quedarse con Reyes Estévez. El hijo del torero recibió la llamada de su padre, pero no le hizo cambiar la idea de dejar el concurso, dejando la decisión en el público.

La cuñada de Rocío Jurado también vivió una de los momentos más emotivos de su vida, cuando su hija Chayo le dijo que iba a tener una nieta. A Rosa Benito se le puso una cara de alegría, que parecía que estábamos viéndola en 3D…

Y para rematar la gala, llegó al plató el “terremoto Nízar”, con más tristeza que nunca por haber dejado el donde ha sido muy feliz, a pesar de todo. Pero pronto se la pasó el desánimo, cuando el presentador la dio paso para hablar con sus compañeros, repartiendo para todos. A Jacobo le aseguró que no estaba muerta; a Kiko Rivera le deseo ánimos para quedarse en la isla y a Sonia la dijo que no se dejase ningunear.